Amor, conocimiento, piedad

Por Fabián Maero

Un ejercicio simple aunque revelador de los propios valores e ideales consiste en imaginarse en el final de la vida – por ejemplo, asistiendo imaginariamente al propio funeral (actividad de reminiscencias dickensianas), o redactando nuestro epitafio. Esa eternidad imaginaria se consulta de esta manera para extraer de ella algunas intuiciones –exploramos ese futuro para explorar valores que guíen la vida presente. Desde ese instante hipotético e inexorable, en que…

Hágase miembro hoy y siga leyendo